En palabras
de Fidel Castro “sin valores éticos no hay valores revolucionarios” y esto
quiere decir que la ética, entendiendo este concepto desde la prespectiva del
activista político como una energía
interna intima e individual que hace que un sujeto se entregue en cuerpo y alma a
una causa que es considerada superior y por encima de los demás valores e intereses circundantes, y lo hace
impulsado por esa energía interna llamada ética .La ética abarca y explica la
conducta humana desde la óptica de la moral pues esta explica las reglas
morales de manera racional. Pero la ética se diferencia de la moral en que esta
última se limita a la obediencia ciega de las normas, las costumbres y los
preceptos o mandamientos jerárquicos o
religiosos marcados por el poder de turno a diferencia de la ética que busca
fundamentar la manera de vivir por el
pensamiento humano es decir se rige por
fundamentos del pensamiento intimo
La ética
existe fundamentalmente en el corazón y en la mente del sujeto que la posee, es pues un concepto
inmaterial y sentimental, aprendido y asimilado desde la razón y el corazón. El activista político cuando es honesto y
desinteresado, se suele entrega a una causa por imperativos fundamentalmente éticos
con forma y contenido político a una causa
que está sustentada en valores éticos, sociales, humanitarios, patrióticos,
libertadores etc. Pero no nos confundamos, la causa puede ser valores éticamente justos por su contenido
humanitario y libertador pero eso no quiere decir que todos aquellos activistas
encuadrados en esa causa lo sean por impulsos éticos, lo pueden ser por otras motivación
para nada subliminares tales como el
enriquecimiento personal el egocéntrico apego al poder al protagonismo o al
posibilismo arribista. Es obvio que estos factores no se deben considerar argumentos
éticos. Su definición más correcta sería la de interesados y oportunistas, categoría
está muy abundante en el mundo de los políticos profesionales, incluso en el
campo de la izquierda radical. El lucro la avaricia y el afán por el poder es obvio
que son alicientes interesados y egoístas que nunca podrán ser considerados
como valores éticos o altruistas, porque estos necesariamente exigen el prurito
de la ética revolucionaria o del desinterés
altruista y la entrega desinteresada a
una causa.
Aspecto diferenciador este a tener en cuenta en el análisis ético de las actividades que desarrolla el
activista político, su mayor o menos carga de comportamiento ético, que como
vemos está directamente relacionado con la profunda intencionalidad
que motiva sus actos, independientemente del contenido de esos actos. Es decir
si el motor que arrastra su voluntad es de motivación ética y desinteresada, su comportamiento será
éticamente revolucionario. Si por el contrario lo que le impulsa sus actos es
un profundo egocentrismo y un afán de protagonismo personal, o de procurar un
beneficio propio no habrá nada de ética
en sus actos, aunque los hechos efectuados hayan sido los mismos. Actos que habrán sido generados por impulsos negativos que tarde o temprano
afloraran negativamente en su ámbito de influencia.
¿Y qué
es la ética revolucionaria? Buena
pregunta para aquellos jóvenes inquietos y altruistas que buscan darle sentido
a su existencia y desean cambiar la realidad de la crueldad del sistema
capitalista por otro modelo más humanizado y equilibrado en cuanto a la equitativa
distribución de las riquezas en la sociedad y alcanzar mayores cotas de
libertad. Aquí viene a cuento conectar con ese tópico que se suele achacar a
los comunistas eso de que “el fin NO justifica
sus medios” , dando a entender que los “medios” de los comunistas ( unos
medios que su propaganda los distorsiona y los hace aparecer como brutales y
sanguinarios) para renglón seguido afirmar que aunque sus fines sean nobles y
positivos para los trabajadores oprimidos y para la sociedad en general sus métodos son
crueles y éticamente despreciables y que nunca podrían justificarse .
Y ciertamente desde una perspectiva ética y si es revolucionaria aun mas ,unos
fines que basados en la ética
revolucionaria que serian la consecución de un Estado socialista que supone la anulación
de las desigualdades sociales ,imponiendo
la igualdad entre todos los ciudadanos
donde el estado cubriría sin excepción todas sus necesidades materiales y culturales, donde los principios de igualdad,
fraternidad, solidaridad, humanidad etc. regirían en el nuevo modelo de orden y
de Gobierno como valores políticos supremos, sería absurdo e incongruente de
cuadrar por quienes han asumido estos
valores como el objetivo y bandera ética revolucionaria como el fin de su lucha empleasen medios contrarios y contradictorios a sus propios
fines, contrario a su naturaleza ética, no cuadra porque es absurdo y solo suele ser un burdo y
vulgar slogan propagandístico de la
burguesía.
Esta frase de
que “el fin justifica los medios
“ la suelen emplear y muy bien por cierto quienes no tienen ética en sus fines,
el lucro y la ganancia, ni
tampoco en sus medios, las guerras
siempre tras el botín, la división de la sociedad en clases sociales en explotadores y explotados, dominantes y dominados,
el robo y el expolio colonial etc. etc. Es la propia burguesía quien se
puede emplear y muy bien a sí mismo la dichosa frase, pero más expresiva ,tal
como: el fin del lucro y el expolio justifican los medios brutales e inhumanos , porque el fin condiciona
éticamente el medio y viceversa, y el
fin de la burguesía , el lucro y la avaricia para el
enriquecimiento individual exclusivo de su clases social, no parece que se le pueda dar un
valor propiamente “ético “a este fin .Y por otra parte este fin burgués suele
estar bien lejos de la ética comunista que se suele apoya en alcanzar un fin basado en el bienestar colectivo , basado en la igualdad y la abolición de la sectaria y privilegiada
clase social burguesa para crea una sociedad igualitaria .Así pues ,¿ Donde
podemos encontrar ética en las entrañas
de la burguesía y en su modelo de Estado ? Difícilmente encontraremos ética en cada una
de sus formas de hacer la política, la
economía la guerra, etc.
Acaso puede haber ética en las prácticas
políticas y económicas y sobre todo militares de la burguesía cuando pone a su disposición millones de hombres y
mujeres movilizándolos como “carne de cañón” en sus guerras, que siempre suelen
tener la motivación de conquistar o defender mercados, mercancías y materias
prima vestidas claro está, de subliminares disculpas de defensa de la patria y
sus libertades. Y curiosamente em las guerras agredidos y agresores emplean los mismos
argumentos. Y así ninguno contaran a sus víctimas, a la “carne de cañon” cuya
propiedad se han arrogado y la van a sacrificar en el “altar sagrado” de la
propiedad privada y el mercado, de sus mercado en competencia con el de sus
enemigo. Nadie pues les dirá la verdadera causa del porque van a morir. Alguno ve ética en este
comportamiento, de justificar las matanzas del millones de jóvenes en lo mejor
de su vida, par un perverso fin de defender la propiedad privada y el
enriquecimiento de las oligarquías nacionales.
Yo no la veo ni creo que la vea nadie
a no ser que haga un juego de palabras cambiando los conceptos. Donde se trata
de defender la propiedad privada y los intereses de las poderosas oligarquías
pongo simplemente los intereses de la patria, valores estos que la burguesía suele propagar subliminarmente como valores
supremos, pero que siempre estarían cargados de tópicos e incomprensible valores para la gente de la calle y
cuando la “carne de cañón” se le obligaba a arriesgar su vida en las
trincheras lo único que le estimulaba a dar el paso “patriótico” solía ser la
amenaza de ser fusilado o ejecutado in situ por el oficial“ patriótico” de
turno si no se “cumplía con su deber”
Quisiera que el lector aprecia la diferencia
del ético valor de defender a la patria,
en el caso de que esa patria este regida
por un gobierno popular al servicio no de una minoritaria clase social
explotadora y belicista sino al servicio de la inmensa población trabajadora
Y por cierto, ¿qué es eso del “Deber con la patria” Puede haber ética en
cumplir con ese “Deber”? ¿Será ese un
concepto relativo a alguna amenaza
potencial del enemigo? y ¿ porque el enemigo nos agrede? y ¿quien agrede a quien ?
porque en la otra parte a los pobres soldaditos les dirían los mismos argumentos
de que hay que defender la patria de la
agresión del enemigo. ¿Entonces que es la patria y que amenaza a la patria?
Que a nadie se le ocurriese preguntar en la
trinchera salvo pena de sedición,
insubordinación o cualquiera de los innumerables artículos penales del rigido
régimen militar. Es el colmo que el bien más preciado que tenemos los humanos,
la vida, este en manos de unos conceptos ambiguos, ininteligibles, y
radicalmente manipulables porque puedes morir sin enterarte porque, tras descartar
la infantil explicación oficial. Y así seria oportuna la pregunta ¿Sera obligación
ético ese “morir por la patria”? lo sería si, cuando el soldado comprende que su patria está siendo agredida
por un enemigo carente de ética y bien con intenciones de
arramplar botín de guerra . Y lo seria cuando su patria , el concepto de “patria”
no fuese un valor abstracto e utilitario utilizado por la clase social burguesa
que ostenta el poder, como medio para manipular al pueblo llano y utilizarlo como
“carne de cañón” a su servicio, para la defensa de sus rastreros intereses económicos y de mercado. Lo seria cuando la
PATRIA fuese el lugar donde se asienta
una comunidad nacional donde el Estado que rige su territorio haya sido
instituido por la inmensa mayoría de la población, es
decir por la clase trabajadora, un gobierno al servicio prioritario de la población
sin privilegiados tras haberles arrebatado
el poder y desarmadas las burguesías guerreras nacionales. Lo seria cuando la
patria fuese agredida por otros estados burgueses para destruir sus conquistas sociales y para apoderarse
de sus recursos. Vemos pues que la defensa de la patria solo seria obligada y éticamente
defendible cuando atacar a la patria es atacar a la propia integridad nacional
compuesta por su población global y a sus intereses nacionales
Y esto lo entendieron muy bien los ejércitos
zarista en la I Primera Guerra mundial en plena revolución socialista donde las
tropas desarmaron a sus oficiales y se unieron al ejército Rojo para derrotar
al Zarismo, y hacer la revolucion bolchevique ,que era mejor
peleando morir por una revolución libertadora
que morir por el tirano que los utilizaba como “carne de cañon”para su
propio beneficio y el de sus aliados. Y también se entiende el concepto castrista
de “Patria o muerte” que resume el contenido ético de luchar por una patria
socialista liberada de sanguijuelas opresoras internas y extranjeras por una
patria gobernada por y para el pueblo cubano
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Cualquier comentario que se salga del rigor de la educación y la compostura democrática, que se dé por borrado